domingo, 6 de febrero de 2011

Es tarde. El reloj marca una hora avanzada en la penunbra, y la habitación oscura no da signo de vida.
Es tarde.
Su corazón late tan deprisa, que es imposible seguir su ritmo, una gran masa de energía acumulada en su pecho y un pinchazo, tenue en su estómago.
Miedo.
"Ojala no lo hubiera tenido"
"Ojala hubiera sido más liviana, como las hojas en otoño"
Sin embargo, no quiere dejarlo ir, no puede.
Pero la escalera es larga, es eterna y ella no está allá arriba, en el trono, ha de seguir subiendo.
"Tengo un gran secreto, indecible, imborrable."


"¿Cómo pudiste herirlo?"

Tengo miedo, pero tengo también en el doblez del suave vestido, una desición, es el momento de hacerse uno, y hablar.
3.
Es el momento de luchar por lo que quieres. ¿Qué quieres?
2.
¿Quieres algo?
1.
...
Continue?

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